Cómo borrar la huella digital de una persona fallecida

Cómo borrar la huella digital de una persona fallecida

Ahora mismo, la gran mayoría de las personas del planeta dispone, en mayor o menor medida, de una huella digital en la red global. Tras el fallecimiento de un amigo o un familiar, quizás tengamos que afrontar la dolorosa tarea de borrar esta huella en internet. ¿Es posible? ¿Qué debo tener en cuenta? ¿Conseguiré borrarlo todo? Te explicamos cómo borrar la huella digital de un fallecido. Para ver más, sigue leyendo.

¿Qué es la huella digital?

Podemos definirla como el conjunto de información sobre nuestra persona o sobre nuestras acciones en la red global -a través de textos, fotos, vídeos, emails, conversaciones de chat, historial de navegación online…- que van definiendo nuestra identidad digital y que se registran en internet. Son datos que quedan disponibles de manera permanente, y sus contenidos son accesibles para prácticamente cualquier persona sin límite de espacio ni de tiempo. La buena noticia es que aunque requiera trabajo la huella digital se borra si así se quiere, o por lo menos en gran medida.

¿Es importante borrarla cuando fallece una persona?

Depende del punto de vista que tuviera en vida la persona que ha fallecido y también de la opinión de sus allegados al respecto. Desde luego que muchos prefieren el borrado de su vida digital por diferentes motivos, como su derecho a la intimidad, la privacidad y el honor o para evitar el dolor que puede causar su rastro en internet a la gente que les quiere. Desde luego que es un derecho importante, aunque no suponga una obligación.

Cómo borrar la huella digital de una persona fallecida paso a paso

¿Qué tener en cuenta antes de empezar?

En primer lugar, hay que respetar la voluntad de la persona al respecto, y si no se ha expresado claramente (en ese sentido es útil escribir una carta para que borren mis datos personales) tomar una decisión valorando la situación.

En segundo lugar, hay que valorar si se realiza ese borrado de la huella digital por cuenta propia o si se delega en algún servicio profesional de cara a efectuar esa ardua y dolorosa tarea. Quizás el propio seguro de decesos de la persona incluya el borrado de la huella digital y podamos hacer uso de ese útil servicio a través de esa vía.

El derecho al olvido, el gran aliado

El gran aliado para las personas que quieran, en vida o a su fallecimiento, eliminar su huella digital es el denominado derecho al olvido, que vio la luz en 2014 después de una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que reconoció el derecho de los ciudadanos a solicitar que se borren los enlaces a su información personal.

Una buena noticia que, sin embargo, presenta un inconveniente: para cualquier persona es complicado en el momento actual manejarse en el día a día sin utilizar internet no sólo en el plano personal -en el que podrían buscarse alternativas, aunque resultase más complicado- sino por encima de todo en el práctico (las pertinentes gestiones sanitarias, económicas, etcétera) y el profesional. Todo esto hace que la rueda siga girando y nuestra huella digital se vuelva a ampliar aunque hayamos conseguido borrar gran parte de la misma.

Email

El primer gran sistema de comunicación online, vigente y tremendamente utilizado personal y profesionalmente hoy en día. ¿Quién no dispone de una o varias direcciones de email? Es sencillo dar de baja nuestro correo electrónico, o el de una persona que haya fallecido si nos ha facilitado las claves. Algo más complicado será si no es así.

Redes sociales

También es importante, si así lo queremos, saber cómo eliminar toda la información de Facebook, Instagram y otras muchas redes sociales. La marea de las rrss ha inundado, para bien o para mal (cada cuál tendrá su opinión) el mundo virtual, convirtiéndose en una gran alternativa de ocio y un modo de comunicación para millones de personas.

Lo cierto es que nos exponen demasiado y dan mucha información sobre nosotros no sólo a los demás, sino a empresas interesadas en conocer nuestro perfil para satisfacer sus intereses.

Si queremos ganar en intimidad o borrar la huella digital de un fallecido, deberemos preocuparnos de eliminar nuestros/sus perfiles en las redes y a ser posible nuestro/su pasado en ellas.

WhatsApp y otros servicios de mensajería

A caballo entre el ocio y el negocio, plataformas como WhatsApp y similares se han revelado tan útiles y prácticas como arriesgadas, pues también nos exponen. El borrado de la huella digital también debería incluir la eliminación de estas aplicaciones de comunicación en los dispositivos de la persona.

Buscadores de Internet

Internet es la gran biblioteca global por su comodidad y eficacia, aunque no está exenta de muchísima desinformación. La huella de nuestras búsquedas refleja mucho sobre nuestras acciones, gustos e intereses, así que también revela una enorme cantidad de datos acerca de nosotros.

¿Cómo eliminar mis datos personales de internet? Mediante un laborioso proceso que va mucho más allá de eliminar el historial de búsquedas, para que nuestro paso por la red global quede lo más limpio posible.

Otros servicios

Pero nuestra huella puede estar en numerosas acciones más, desde la interacción con un banco hasta la búsqueda en un directorio, pasando por nuestra participación en un foro. Por ello un buen servicio de borrado digital debe contemplar cualquier acción que hayamos podido llevar a cabo en la red y ser capaz de hacerla desaparecer.

¿Conseguiré borrar cualquier rastro?

No es una tarea sencilla, por mucho que hagamos un trabajo concienzudo a la hora de borrar huella digital e incluso encarguemos esa labor a profesionales, pero cuando menos sí se podría minimizar en gran medida ese registro.

Hay que tener en cuenta además que el antes mencionado derecho al olvido no es absoluto, pues los buscadores no están obligados a retirar todo cuanto les soliciten los afectados sino sólo el acceso a aquellas informaciones lesivas que no se justifiquen por el interés público ni la relevancia de la persona afectada.

Recomendaciones finales

  • Pensar bien todo al utilizar cualquier página de internet, aplicación o rrss: si necesitamos esta red social, si publicar este video o foto nos expone o no… poniendo en la balanza lo que ganamos y lo que perdemos
  • Fijarse bien en la letra pequeña y en los inconvenientes que nos puede causar proporcionar nuestros datos, algo que cada vez nos demandan con más frecuencia las empresas.
  • Informarnos acerca de otras alternativas de navegación online, plantearnos apostar por buscadores o redes sociales que ofrezcan una mayor privacidad o cuando menos configurarlos y usarlos de una manera que nos permita más intimidad.
  • Darnos de baja en cualquier plataforma, aplicación o red social si estimamos que es lo mejor. Si queremos eliminar nuestra huella digital, informarnos bien acerca de cómo hacerlo por nuestra cuenta -en ese sentido puede ser útil la web deseat.me– o confiar en alguien fiable. Por ejemplo, mediante la garantía de un seguro o con la ayuda de otros profesionales.