Una buena comida, una visita al museo o un recuerdo del viaje… piensa en lo que podrías hacer con el dinero gastado en el seguro de viaje. Después de todo, probablemente ni siquiera lo uses, ¿no?
Piensa que te puedes ver envuelto en una situación bastante difícil y costosa si experimentas problemas mientras estás de vacaciones sin una póliza a la que recurrir.
Para explicarlo, echemos un vistazo a algunas complicaciones a las que se enfrentan miles de viajeros cada año para ver si vale la pena tener un seguro de viaje.
Atrapado
Madrid. Hace unas horas que has aterrizado después de despegar de Tenerife y te espera una larga escala camino a Cancún. La vida te sonríe.
Pero entonces, una fuerte tormenta azota el aeropuerto, lo que conlleva riesgo de vientos extremos. Se cancelan los vuelos de las próximas horas. Y lo que es peor, dado que la cancelación se debe a un motivo fuera de control de la compañía aérea, no se sabe cuando podrás llegar a tu destino. Puede que no te ofrezcan un vuelo alternativo hasta dentro de dos días.
Sin embargo, con el seguro de viaje, tienes opciones. Tu aseguradora te indemnizará por las demoras ocasionadas en función de lo que tengas incluido en tu póliza.
Sea como sea, el seguro de viaje te hace la vida mucho más fácil. Y teniendo en cuenta que en flightaware.com se pueden ver cientos de cancelaciones cada día, vale la pena tenerlo.
Una caída muy cara
Moverse por Phuket, en Tailandia, no es tan sencillo como en Londres, París o Nueva York. Básicamente hay tres opciones: alquilar un automóvil, usar tuk-tuks o alquilar un ciclomotor. Es fácil saber por qué muchos turistas que viajan a Tailandia optan por la última opción: los ciclomotores son tan baratos como divertidos.
Así que eliges un Honda Scoopy, asegurándote de llevar casco cuando lo conduces. Si tienes cuidado, probablemente no te pase nada. Pero sigue habiendo riesgo, y con un movimiento en falso podrías acabar con una herida grave, una pierna rota o algo peor. Además, si no tienes seguro, también recibirás una factura cuantiosa del hospital: con una fractura de cadera más un viaje en una ambulancia aérea que te costará unos 88.000 euros en Tailandia, caerte te saldría muy caro.
Por supuesto, los accidentes de tráfico no son exclusivos de Tailandia: se producen alrededor de 27.000 cada día en el mundo. Y el seguro de viaje no solo te protegerá en estas situaciones. Te lesiones al caerte por las escaleras o permanezcas hospitalizado por enfermedad, la cobertura adecuada te garantizará que no vuelvas a casa con una factura importante.
Viajando con menos de lo planeado
Supongamos que decides tomarte unas vacaciones fotográficas a la India. Entre cámaras, lentes, un ordenador portátil e incluso un dron si te quieres dar el capricho, esa maleta podría valer fácilmente varios miles de euros.
El índice de equipaje perdido puede haber alcanzado un mínimo histórico, pero no estamos exentos de la posibilidad de que nos ocurra: según los datos más recientes disponibles, las aerolíneas de todo el mundo perdieron o extraviaron 22,7 millones de maletas en un año. Y aterrizar en el aeropuerto de Delhi y descubrir que la compañía aérea ha extraviado tu equipaje podría ser mucho más que un inconveniente. Si no aparece, la aerolínea solo está obligada a pagar una determinada cantidad por kilo de equipaje perdido, hasta alrededor de 1000 euros.
Así que si te gusta viajar con aparatos caros, podría merecer la pena contratar el seguro adecuado.
Fuera de pista
A veces, hay que estar superpreparado.
Te diriges a los Alpes para disfrutar de tus primeras vacaciones de esquí. Vas tranquilo sabiendo que has contratado un seguro de viaje para protegerte en caso de que tu falta de experiencia te acarree problemas. De hecho, acaba sucediendo, y terminas en un hospital con una pierna rota el día antes de volar a casa. Al menos el seguro pagará las facturas del hospital y un vuelo más adelante… ¿verdad?
No tan rápido. Muchas pólizas de seguro de viaje estándar no cubren ciertas actividades de alto riesgo, como los deportes extremos. Y descubrirlo mientras estás tumbado en un hospital no es la situación ideal
Por lo tanto, cada vez que viajes, asegúrate de comprobar que estés cubierto para todo lo que planees hacer. En algunos casos, es posible que necesites una póliza especial. Pero la inversión merece la pena. Puedes consultar los distintos seguros de viaje y ver cuál se ajusta a tus necesidades aquí.
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