El gas licuado de petróleo (más conocido como GLP) se ha convertido en una alternativa al diésel y la gasolina por tener un precio más reducido. Aunque existe la posibilidad de comprar un vehículo GLP, las personas que deciden convertir un coche a GLP aumentaron un 29,6% en 2024 según ASTRAVE. Te contamos cómo hacerlo y qué coches diésel y gasolina se pueden convertir a GLP.
Las siglas GLP significan gas licuado de petróleo. Es un combustible fabricado a base de distintos gases obtenidos del propano y el butano. Este compuesto se obtiene a través de un proceso de destilado del petróleo. El estado natural del GLP es gaseoso, aunque puede pasar a líquido cuando aumenta la presión o la temperatura.
¿Estás considerando convertir tu coche a GLP? Estas son las ventajas que obtendrás si lo haces:
Cuando hablamos de adaptar un coche a GLP nos referimos a que este no cuenta con la opción bifuel, es decir, con una instalación que permite el repostaje de gas y carburante. Estos son los coches que se pueden convertir a GLP:
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Los coches diésel que permiten la convertir a GLP deben cumplir los siguientes requisitos:
Estos son los mejores modelos de diésel y gasolina para convertir a GLP, según la Asociación de Transformadores de Vehículos (ASTRAVE)
✅ Importante: muchos de estos modelos se encuentran en el ranking de mejores coches diésel para convertir a GLP gracias al impulso de esta práctica entre el colectivo de taxis y VTC.
Podrás transformar tu coche gasolina a GLP siempre y cuando:
Para convertir tu coche a GLP debes acudir a un taller especializado y cuente con la homologación para hacerlo. La instalación es muy sencilla y rápida. Estos son los pasos para instalar un un kit de conversión de gas licuado del petróleo en tu vehículo:
✅ Recuerda: si te instalan GLP en el coche y retiran la rueda de repuesto para colocar el depósito deberás llevar siempre un kit antipinchazos.
El coste de convertir un coche a GLP oscila entre 1.800 y los 2.200 euros. El precio de la instalación varía en función de las características del vehículo, el tamaño del depósito y la tarifa de mano de obra que aplique el taller autorizado.
Posiblemente te estarás haciendo esta pregunta: ¿merece la pena convertir mi coche a GLP? Para estimarlo primero debemos tener en cuenta el precio del gas licuado: suelen rondar los 0,90 euros el litro. Además, hay que tener en cuenta que tu vehículo seguirá demandando el consumo de gasolina o diésel en algunos tramos de la marcha.
Se considera que si recorres entre 30.000 y 50.000 kilómetros al año ya se estaría recuperando la inversión de instalar GLP en un coche gasolina o diésel.
Para convertir tu vehículo a GLP debes acudir a un taller autorizado que pueda homologar la instalación del depósito de gas.
El examen de ITV no varía respecto a uno convencional. De hecho, se evalúan los mismos puntos a excepción de la revisión del tanque de gas y las tuberías.
En términos de sonido del motor, las diferencias son prácticamente imperceptibles. Si nos fijamos en la conducción, es cierto que el gas licuado del petróleo presenta una pérdida de potencia entre el 5 y 10% respecto a un carburante convencional.
Sí, existe una mayor probabilidad de avería ya que el vehículo convertido a GLP cuenta con un sistema de alimentación adicional con su correspondientes conexiones mecánicas y electrónicas. Por este motivo te recomendamos que cuentes siempre con un seguro de auto confiable.
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