¿Qué es el Consorcio de Compensación de Seguros?

¿Qué es el Consorcio de Compensación de Seguros?

Casi todos habremos oído hablar del Consorcio de Compensación de Seguros, aunque quizás muchos no tengan claro en qué consiste. Hoy vamos a explicar qué es y su principal razón de ser, que cobra más sentido todavía en esta época de crisis sanitaria y económica, y naturaleza desatada.

Es una entidad pública empresarial española adscrita al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a través de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones. Desempeña múltiples funciones en el ámbito del seguro y, entre ellas, destacan las relacionadas con la cobertura de los riesgos extraordinarios, el seguro obligatorio de automóviles, el seguro agrario combinado y la liquidación de entidades aseguradoras. Se encarga de indemnizar a los clientes de un seguro privado – empresas, asociaciones o particulares- por los daños de los que no pueden hacerse cargo las aseguradoras, correspondientes a riesgos extraordinarios. Obtiene sus fondos de todos aquellos que tienen contratado un seguro: de su importe total se destina una pequeña parte a ese fin, que va incorporado a la prima y figura con el concepto de “Consorcio”.

El Consorcio no sólo ayuda a enjugar las pérdidas económicas directas, sino que contempla también situaciones como la pérdida de beneficios.

¿Qué riesgos cubre el consorcio de compensación de seguros?

El consorcio se hace responsable (siempre, claro está, que se haya contratado anteriormente un seguro para las personas o bienes afectados) en multitud de riesgos, situaciones y supuestos, que clasificaremos en tres grandes grupos:

Fenómenos extraordinarios de la naturaleza

El consorcio indemniza los daños producidos por fenómenos de la naturaleza, como inundaciones, terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, ciclones o tornados e incluso caída de meteoritos.

Daños por violencia provocados por seres humanos

Esta entidad pública indemniza los daños “derivados de hechos de incidencia política o social”, los males ocasionados violentamente como consecuencia de terrorismo, rebelión, sedición, motines y tumultos populares e incluso los provocados por actuaciones de las fuerzas armadas y de seguridad en tiempo de paz.

Seguro de automóviles

El consorcio también puede satisfacer indemnizaciones relacionadas con el seguro de automóviles por múltiples motivos. Por ejemplo, en caso de que suframos un accidente de circulación y el vehículo que haya provocado el siniestro no cuente con su obligatorio seguro de coche, o hubiera sido robado o se diese a la fuga después del accidente.

Cómo solicitar la indemnización paso a paso

El consorcio indemniza los daños siempre que se cumplan esas circunstancias y se den los pasos pertinentes. Son estos:

Dejar intacto el espacio dañado

Como si fuera el escenario de un crimen, no debemos tocar nada en un primer momento. Tendremos que mantener todo tal y como estaba, aunque sólo hayan quedado restos tras el daño causado, de cara a la actuación pericial.

Contactar rápido al consorcio para comunicar el siniestro

Lo antes posible deberemos ponernos en contacto con el consorcio de compensación de seguros para informarle de lo sucedido.

Realizar la reclamación

El paso fundamental, solicitando una compensación que puede realizarse de tres maneras: directamente en la delegación regional del consorcio que corresponda, en función del lugar en el que se produjo el siniestro; a través de nuestra compañía de seguros; o merced a un mediador. Existen tres vías de contacto: por teléfono, por escrito u online (en la web www.consorseguros.es).

Hay que realizar los trámites con celeridad, pues la normativa determina que el plazo para presentar la reclamación desde que se tiene conocimiento del siniestro es de una semana. Los afectados, amén de contar con la póliza de seguro (por ejemplo, el de un seguro de automóviles) deben presentar la mayor cantidad de documentación que pueda probar los daños: fotografías, vídeos, actas notariales, facturas, certificados oficiales…

Minimizar daños

Hasta donde sea posible es nuestra obligación moral, práctica y legal trabajar para minimizar los daños ocasionados. No todo el peso puede recaer en las compañías de seguros y en el Consorcio, así que los afectados deberán adoptar las medidas necesarias para realizar esta necesaria tarea.

Esperar la respuesta positiva del consorcio y su indemnización

Nos queda ya únicamente esperar a la resolución del consorcio y en caso de que sea positiva aguardar a que nos abone la indemnización pertinente.