Cómo mejorar la comunicación interna en tu empresa
Por qué la comunicación interna es clave para el rendimiento
Comunicarse de forma eficaz siempre es algo positivo. Cuando les dices a los demás lo que quieres de manera clara y concisa, recibes justo lo que buscas. Imagina esto en un entorno laboral. Si cada empleado no fuera capaz de transmitir sus ideas, el rendimiento sería muy pobre.
Y lo anterior es especialmente cierto para los cargos directivos. Su visión y órdenes permean a toda la estructura de la empresa. ¿Qué ocurre si sus indicaciones son abstractas y enrevesadas? Se desata el caos.
Impacto directo en relaciones laborales y clima de equipo
Un aspecto en el que se nota una buena comunicación interna es en las relaciones laborales. Si es la adecuada, los malentendidos se reducen, lo que evita conflictos innecesarios. Un trabajador que tiene que enfrentarse a diario a indicaciones contradictorias o incoherentes acabará harto. No tendrá claro qué debe hacer, así que al final optará por seguir su criterio.
El clima de los equipos se va a enrarecer. Poco a poco, los miembros dejarán de confiar entre sí y surgirán enfrentamientos. Y todo porque la comunicación no es clara.
Conductas que bloquean una buena comunicación
Existen diversas conductas que afectan a una buena comunicación. Una de las más comunes es la escucha selectiva. Esta consiste en que el oyente solo presta atención a aquello que le interesa. Otra bastante frecuente es la interrupción constante, que llega a ser muy molesta porque impide el desarrollo de las ideas.
También debes tener en cuenta que el uso de un lenguaje ambiguo, la falta de contacto visual o prestar atención a un teléfono móvil son relevantes. Al fin y al cabo, evitan que la comunicación sea efectiva.
Estrategias para mejorar la comunicación dentro de tu equipo
Dada su importancia para las relaciones laborales, es esencial que emplees las estrategias apropiadas. Estas tienen como finalidad reducir al mínimo las trabas que se ponen a la comunicación, sean causadas por el emisor o por el receptor.
Cómo planificar reuniones útiles y no repetitivas
La clave reside en definir el objetivo de la reunión, el porqué de que se celebre. Si los asistentes no saben qué se pretende lograr, desconectarán. Tras esto, establece los temas que se van a tratar y asígnales un tiempo. ¿Qué logras con esto? Disminuyes los desvíos y las repeticiones.
Además, comparte el plan con quienes vayan a participar en la reunión con suficiente antelación. Así, podrán prepararse a fondo y tomar las decisiones que estimen oportunas.
Uso de herramientas digitales y protocolos claros
Tienes a tu alcance numerosas herramientas para realizar o planificar las reuniones. Desde Microsoft Teams a Zoom, todas ellas favorecen una comunicación fluida y sencilla. Asimismo, puedes complementarlas con aplicaciones para gestión de tareas y para compartir documentos.
En cuanto a los protocolos, incluye reglas para tomar la palabra, establece tiempos de intervención o un registro de acuerdos. De este modo, reduces las interrupciones y los malentendidos.
Cultura organizativa: identidad, valores y coherencia
Junto con lo anterior, la cultura organizativa de tu empresa puede fomentar la comunicación. Si toda la plantilla está alineada con ella, los problemas disminuirán. Cada persona conocerá las normas que existen para expresarse y los canales apropiados.
El rol del manual de identidad corporativa
Un manual es una herramienta de gran potencia. En sus páginas debes dejar clara la identidad corporativa de la empresa. Al tener este documento, cualquier miembro de la plantilla podrá consultarlo en caso de duda. Además, contribuye a que los recién llegados se integren en poco tiempo.
Reforzar la confianza con acciones de team building
La confianza es un aspecto importante de la comunicación. Si los empleados se encuentran en un ambiente propicio para dar opiniones, no tendrán reparos en explicarse. Para conseguir este clima, el team building es una herramienta que te será de gran utilidad.
Con ella puedes realizar diferentes acciones, como resoluciones de problemas en grupo o fomentar el reconocimiento público. Gracias a ellas, los miembros del equipo no tendrán trabas para comunicarse.
Cómo adaptarlo a pequeñas empresas o franquicias
Las empresas pequeñas o las franquicias pueden beneficiarse de un buen team building. La clave reside en diseñar actividades de bajo coste, pero alto impacto. Estas se deben centrar en la colaboración, la comunicación y la confianza. ¿Cuáles puedes usar? Dinámicas breves durante la jornada laboral, almuerzos temáticos o talleres internos.
Una franquicia tiene más margen de maniobra, aunque existen algunos elementos a tener en cuenta. Uno de ellos es que se debe mantener la identidad de marca, pero adaptando cada acción a la realidad de los establecimientos. Así, es posible conseguir grandes transformaciones.
Comunicación horizontal en estructuras reducidas
Si tu empresa es pequeña, la comunicación horizontal es muy útil. Te ayuda a eliminar barreras jerárquicas que no son necesarias, ya que no dispones de muchos recursos. De este modo, ganas en agilidad y flexibilidad a la hora de transmitir información, algo crucial.
Y si quieres conseguir mayores ingresos, no olvides la importancia de las relaciones profesionales. En este contenido te damos las claves que debes conocer: “Cómo mejorar tus relaciones profesionales para potenciar el éxito en ventas”.
Buenas prácticas que puedes aplicar desde ya
- Establece reuniones breves con una agenda clara.
- Utiliza herramientas colaborativas.
- Fomenta la escucha activa.
- Define protocolos básicos de comunicación.
- Organiza pequeñas dinámicas de integración para los recién llegados.
Con el team building y otras técnicas, puedes mejorar la comunicación dentro de una empresa. Exigirá un cierto trabajo, pero los resultados se dejarán ver de manera contundente. Y si estás en búsqueda de un nuevo empleo, en GENERALI queremos conocerte. ¡No dudes en enviarnos tu currículo!
